viernes, 29 de octubre de 2010

Abuelo de mayo

Amigos van algunas fotos de la plaza de mayo esta tarde,
cheres amis voilà quelques photos ce soir à la Plaza de Mayo


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Toma, Kataplines,

Ahí te van las fotos de la manifestación por la muerte de M. F., y asesinado por algunos de los que ayer lloraban en Plaza de Mayo.

http://www.lahaine.org/index.php?p=48841

Un abrazo,


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Querido Kataplasma, no necesito fotos porque estuve allí, en la primera manifestación espontánea del primer momento y en la marcha a la Plaza de Mayo por el paro convocado por la CTA del segundo día.

Lo que dices de la plaza, sólo lo tomo como un mal chiste proque sé lo bromista que eres... y en cuanto a hacer de esto una competencia funeraria, simplemente me parece algo temerariamente próximo al salto mortal, pero si quieres puedo contarte otra.

Ayer mientras le explicaba a la censita los motivos por los que no respondería al censo (dada mi oposición a la intervención del gobierno al INDEC, aunque le abrí gentilmente la puerta de mi casa, por oposición a la campaña de los medios de la derecha que alimentaron la psicosis colectiva de temor y paranoia frente al peligro de abrirle la puerta al censista) escuché un terrible estruendo y gritos en la puerta de mi calle.

Me asomo al balcón y veo un auto literalmente subido a la vereda que había atropellado a un motociclista (quien parece llevaba el casco en el brazo en vez de la cabeza) y horas más tarde me enteré que estaba muerto. Eso ocurre cotidianamente en el país. Esa muerte anónima y fugaz que casi presencie ante mis ojos, me parece igual de lamentable, y también marché por él.

Debo recordarte que en el mundo del circo, y en este particular circo que es la Argentina, no todos los payasos son buenos ni todos los leones son malos. Hay simpáticos enanos traidores, hay malabaristas que tropiezan en la cuerda floja, hay magos al que le salen mal los trucos y anunciantes de maravillas con mucho carisma, pero el boletero sigue recaudando sin cesar.. (y muy pocos se atreven a tocarle el culo).

A ver cuándo vienes a tragarte algunos sables.

AK


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Ve, Kataplovic, no la tomes conmigo.

Simplemente me pareció que le dabas demasiada bola al difunto Kirchner, una bola que desde la mentalidad de los payasos luchadores no está bien vista, porque creemos que no se la merecía en absoluto. No te voy a hablar de sus tejemanejes con las petroleras ni su tibieza contra los usureros ni su nacionalismo bobalicón, porque sin duda tú conoces mucho más que yo esa realidad, y es normal que te moleste que alguien vaya con actitud de dar leccioncitas desde el otro lado del mundo. No era esa mi intención, créeme. Pero tampoco era mi intención hacer chistes, esta vez.

Es verdad que M. F. era hermano de una compañera del sindicato de oficios varios de la CNT de Madrid, cuya sede, curiosamente, está justo enfrente de los "headquarters" del Club de Payasos Españoles, en la Plaza de Tirso de Molina. Desde hace unos meses ando yendo todas las semanas por allí, y desde las ventanas a veces miro con nostalgia al balcón de enfrente (esto queda entre tú y yo, que no se lo he dicho ni se lo diré a nadie), porque en el fondo echo un poco de menos la risa payasa dentro del anarcosindicalismo. Sin embargo, sé que si estuviera en la acera de enfrente, miraría con más envidia todavía a los compañeros anarquistas y su espíritu de lucha solidaria, y estaría puteando todo el día contra este mundo de domadores domados y artistillas de circo, que ya sabes cómo anda últimamente de alicaído y de timorato.

Además, por lo que leo y por lo que imagino, me da la impresión de que hay muchas similitudes entre lo que está pasando allí en tu país y aquí en el Reino de España. Por un lado están esos sindicatos del poder, subvencionados y untados hasta las orejas por el gobernante con cara de progresista para que parezca que se mueven sin moverse. Frente a ellos, crecen con fuerza esos otros sindicatos de base, que aunque tú digas que no existen buenos ni malos, pues a mí sí me parecen infinitamente mejores y más valientes, porque intentan revivir el sindicalismo de toda la vida, el de clase, el que pelea contra los abusos de los que mandan y disponen y no se vende por dinero ni privilegios. En ese sentido, la muerte de M. F. me pareció muy simbólica y muy dolorosa, infinitamente más dolorosa que la del gobernante, al que yo sí creo responsable y culpable de su sangre derramada. Como del funeral de M. F. no enviaste fotos, y del del gobernante sí, me sentí obligado a criticártelo.

Por otro lado, no creo que pueda compararse un accidente de tráfico con un asesinato político, hermano Katap. Sé que es muy fácil decirlo desde este lugar donde los pensionistas, aun empobrecidos, todavía tienen plata para tomarse sus vinos en los bares y preocuparse nada más que de los abejarucos y su actitud abusiva contra las pobres abejas. Sé que en tu país la situación no es la misma, y que hay muchos pensionistas que hoy rebuscan su comida en los contenedores de basura. Los desempleados, mientras que aquí lloriquean por no poder pagar la hipoteca del piso, allí seguramente andan ya durmiendo en la calle y con el puño cerrado. También soy consciente de que la diferencia entre unos y otros se debe precisamente a ese principio de vasos comunicantes del capitalismo salvaje, por el que el bienestar de los españolitos tiene que venir por cojones de la miseria de los argentinos.

Pero volviendo al tema del accidente, siento que hay una tendencia peligrosa en equiparar un asesinato político con un atropello en la calle. Sospecho que detrás está ese discurso ciudadano que en un momento puede calar en almas buenas y solidarias como la tuya, pero que con el tiempo será manejado y virará hacia un pseudofascismo elitista del tipo Mockus en Colombia, o Ciutadans en Cataluña. Al contrario, creo que hoy más que nunca hay que desterrar a ese gran hermano ciudadano que llevamos enquistado dentro, y volver a manejar los conceptos de lucha de clases y justicia social, le joda lo que le joda a los buenos ciudadanos. ¿No te has fijado, compañero, que el mismo señor que en la calle te recomienda que te pongas el casco en tu cabeza, o que recicles tu basura, o que no chupes del caño de la fuente, por los microorganismos que puedas contagiar, no te has fijado que ese señor es el mismo que luego se burla de ti y te tacha de trasnochado cuando utilizas las palabras "enemigo de clase", "alienación" o "autogestión obrera"?

A mí me parece que esos conceptos son tan útiles ahora como antaño, o incluso más, porque el destierro de las ideas políticas está muy metido en las cabezas de la gente, y eso responde a un diseño muy inteligente por parte de un grupo de señores encorbatados a los que le conviene muy mucho que la gente se crea libre, ciudadana e intocable en su derecho a consumir bienes individualmente.

¿Ves? Al final he acabado haciendo lo mismo por lo que me disculpaba al principio de esta carta. Pero no puedo evitarlo. Piensa que yo también necesito escribir estas cosas para aclararme la cabeza y señalarme el pie del que cojeo.

Te mando un abrazo muy fuerte y te agradezco que me escuches.

Que sepas que yo también te plancho las sábanas todas las mañanas y te hago la cama de la habitación de al lado, esperando a que vengas a visitarme.

Chao,


Arthur

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Estimado Artur, me tranquilizan sus palabras ya que lo veía peligrosamente cercano al discurso gorila por aquí imperante.

Coincido completamente con usted en la necesidad de escribir y de expresarse y sé que usted tiene unas cuantas cosas claras que me alegra leer.


Tal vez la preocupación por el accidente de tráfico haya sido mencionada como payaso viejo, alertado por la masacre cotidiana que se produce en las calles. Pero si bien ciertamente no son muertes con idéntica densidad y consecuencias políticas, todas tienen directa relación con la política. (Desde ya que todo estos temas ameritan ser charlados con más tiempo, entrando en más sutilezas y cara a cara, que es más grato). Una cosa es un accidente de una vieja imprudente y otra cosa es el sistemático atropello de buses que pertenecen a empresas privadas y no a una compañía pública de trasportes, que en su afán de lucro, tienen que cumplir una cantidad de turnos a ritmos y velocidades impuestas más por el lucro que por el servicio público de trasportar pasajeros, consecuencia: además de viajar mal, se viaja peligrosamente, cruzar el semáforo en rojo no es poco común y las habituales noticias de colectivos (buses) que atropellan gente aquí es tratado como "tragedia" o "fatalidad" cuando es directa consecuencia de un servicio público que antepone el lucro (¿hay allí alguna causa política?) en la cantidad de pendejos que mueren como el otro día frente a mi casa, tiene igualmente que ver con el embrutecimiento social, la deficiente educación y el poco valor de la vida en esta sociedad...

Todo eso es una reverenda cagada y es algo ya casi estructural, no empezó ni con De la Rúa ni con Kirchner, habría que remontarse en un proceso de descomposición social de más larga data (dictadura mediante) pero no puedo atribuir directamente al gobierno esa responsabilidad en la descomposición social. Es un proceso que habría que remontarlo a la dictadura por lo menos.

En cuanto a las mafias de la burocracia sindical, efectivamente, por mí hay que fusilarlos simplemene por traidores a la patria y por asesinos (en algunos casos) y efectivamente sí erróneamente Kirchner se ha recostado políticamente sobre estos sectores, hay una gran cantidad de otras cosas que no pueden dejar de verse y reconocerle... (como lo hacen las abuelas y madres de Plaza de Mayo, y muchas otras personalidades más que respetables), en fin, es para seguirla.


Aquí simplemente te reenvío, sólo como muestra, un reenvío a la vez de una compañera de trabajo que está con Pino Solanas (de quien yo me siento más cerca que de Kirchner ideológicamente), pero la diferencia es que ella es eminentemente gorila, ¡y la ha emocionado más la muerte del viejo Alfonsín! (aquí las comparaciones son inevitables, dado la cantidad de gente que se ha congregado al funeral de Alfonso en su momento) y los millones que están despidiendo a Kirchner desde ayer...

Bueno, ella manda un comunicado del Frente Darío Santillán, que puede darte también una imagen de lo que dicen los movimientos sociales mas críticos al kircherismo...

Bueno, yo también me he extendido y no sé si con mucha coherencia.

P.D.: ¡¡Y por supuesto que la lucha de clases está más vigente que nunca!! Que me haces reír el culo suponiendo que yo lo niego.


P.D.2: Un abrazo y no se te ocurra tender un cable de balcón a balcón sin una red abajo, ¿eh?, que eres muy novato aún para ello (y si no lee no me acuerdo ya un capítulo de Rayuela donde hacen algo similar).

Un abrazo grande y a la prochain!

AK

http://www.frentedariosantillan.org/fpds/index.php?option=com_content&view=article&id=307:ante-la-muerte-del-ex-presidente-kirchner&catid=5:territorial-desocupadxs&Itemid=24

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Estimado Arturete, acabo de leer esta nota y no pude dejar de recordar nuestra pequeña diatriba. Se la envío no para continuarla (salvo que sea personalmente y con unas cañas de por medio), sino porque me gustaría que tenga también esta información.. usted va conociendo el circo argentino mas de cerca..
le mando un fuerte abrazo(con tropezón al caminar y subsiguiente caída sobre un charco de agua que deforma el maquillaje)

AK

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1322529
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Bueno, Lucarturo,

A riesgo de que me llames "gorila", o "antisistema" (como me dicen por aquí), o "sabihondo" (en el mejor de los casos), te voy a tener que responder que yo no me creo esa información que me mandas, porque no eres tú quien me la cuenta, ni ninguno de los muchachos del Club que tenemos infiltrados en la Casa Rosada.

Me la proporciona la CIMECO (Compañía Inversora en Medios de Comunicación), una multinacional que, según tengo entendido, además del periódico La Nación controla el 33,4 % de las acciones del Grupo Clarín y el 33,3% de las del español Vocento, propietario de algunos medios fascistones y neofranquistas como Punto Radio y el periódico ABC, que se encargan día tras día en mi país de difundir sus consignas en defensa del pensamiento único, la injusticia, la memez, la estulticia y la inacción, cuando no directamente el odio y la barbarie. Así que no, no me convences, Gran Lucarni, y seguiré señalando con el dedo, como gorilón troglodita que soy, al cuerpo caliente de tu ex-presidente muerto.

Pero bueno, en lo que sí estoy de acuerdo contigo es en que deberíamos hablar estas cosas con unas cañas de por medio. Sólo el destino sabrá si esas cañas serán de cerveza Mahou o de licor Legui.

Ahora mismo lo que tengo que contarte es una historia familiar y pedirte un favor. No tiene nada que ver con el Club, ni con la política verbal en que nos enzarzamos últimamente. Es una cuestión muy personal, y yo creo que tú como viejo artista callejero que eres puedes ayudarme mucho, ya verás.

Resulta que entre las dos últimas cartas que nos mandamos se murió mi abuela. Yo me encargué de quedarme con mi abuelo mientras la enterraban, y tuvimos una conversación bastante emotiva, más por la situación en que se dio que por las batallitas que me contó, que ya las había escuchado varias veces. No sé si te he contado alguna vez, pero mi abuelo vivió en Argentina durante la década de los 30. Su historia personal creo que es muy simbólica, y se resumiría en que llegó a tu país como un pobre de solemnidad, en un acto de caridad, y hoy en día, a sus 93 años, tiene una vida muy acomodada y bastante pasta en el banco, gracias a su espíritu de castellano amarrategui, a su trabajo abnegado durante años y años y a que (según se cuenta en los corrillos familiares) en su día compró unas suculentas acciones de Repsol antes de que ésta se forrara con la IPF de tus amigos los Kirchner. Paradojas de la vida.

Te cuento más en detalle, para que luego entiendas el favor que quiero pedirte.

Mi abuelo nació en un pueblo de Castilla, un lugar medio desértico y de clima extremo, en el año 1917. A los 7 años perdió a su madre, que se murió de fiebres puerperales después del parto de un hermano pequeño suyo, que ya no me acuerdo si nació muerto o se murió al caer en un pozo. Imagínate qué historias más terribles. Su padre también murió a los pocos meses, según mi abuelo de un flato que le dio de tanto trabajar en el campo. Se quedaron solos él y su hermano mayor, de 17 años, que se encargó de sacarlo adelante durante unos años. Un buen día el cura del pueblo decidió reclutar a los dos hermanos y mandarlos a un colegio-seminario que los frailes maristas tenían en un pueblo de al lado. Según mi abuelo los "seleccionó" porque eran buenos chicos, aunque yo sé que los secuestró en toda regla para engrosar las filas del Ejército de Dios, una práctica muy común por aquel entonces en esa tierra mía empobrecida. En realidad, a su hermano mayor le pusieron a fregar platos y servir almuerzos para el personal del colegio, mientras que a mi abuelo sí le dejaron, por compasión, meterse en las clases y, como él dice, "formarse". Después de un tiempo en ese colegio lo mandaron a Argentina para que siguiera sus estudios en el Seminario de los Maristas de Luján. Una vez terminado eso, le pusieron a dar clase en el Colegio Belgrano de la calle Pampa 22-26, que está en Buenos Aires, en un barrio que también se llamaba Belgrano, y que mi abuelo no sabe si existirá todavía. ¿Tú que crees?

Según parece por lo mucho que habla de aquello, ése fue el momento álgido de su vida. Después de un tiempo dando clases como asistente, los frailes obligaban a que los maestros tomasen votos, y él no quiso hacerlo. Se volvió a su tierra, donde ya no podía trabajar como maestro, porque el título de magisterio que había conseguido en Argentina sólo valía para dentro de la Congregación y en el país donde lo había obtenido. En esas circunstancias, se vino a vivir otra vez con su hermano mayor, que ya estaba casado, y que otra vez le sacó las castañas del fuego consiguiéndole un puesto de secretario en una fábrica de otro pueblo de Castilla, donde él trabajaba y donde yo me crié hasta los 14 años. Allí pasó mi abuelo 40 años de su vida, sin vacaciones según mi abuela contaba, y lamiendo el culo de los directores para los que trabajaba, según me imagino yo. Él sigue hablando con gran respeto de esos ingenierios Alberdi, Zunzunegui, o no sé qué cuantitos, que eran, como te podrás figurar, unos tremendos hijos de puta, de la elite tecnócrata cercana a Franco, que utilizaban a su secretario igual para escribirles informes, que para que les hiciera las compras, les recogiese las liebres cuando iban de cacería o les cebase los anzuelos cuando el fin de semana era de pesca...

En fin, que yo tengo la impresión, por lo pesado que se pone al hablar de ello, que en ese colegio de la calle Pampa de tu odiada ciudad se resolvió una parte crucial de su vida, y me gustaría pedirte que algún día que vayas a pasar por allí, me compruebes a ver si todavía está y con una camarita le saques unas fotos al lugar. Seguro que le hace mucha ilusión. ¿Podrás, querido Lucarión?

No corre prisa, ¿eh?, que mi abuelo anda liado ahora con otras historias y, lo que es más importante, parece que tiene cuerda para rato.

Un abrazote, compañero, ya me contarás cómo lo ves.


Fav


P.S. Te adjunto una foto del señor Félix Favila con los hábitos de fraile marista, a ver si te inspira cuando vayas tú con tu artefacto digital...

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Estimando Francesco,

Ante nada mis condolencias por la muerte de tu abuela. No sabía nada y aun desconociendo la relación que tenías, imagino que habrá sido una pérdida importante para tu familia.

Te aclaro que has dado grandes muestras de gorilismo aunque sin duda algo de ello tienes :) "antisistema", jamás lo utilizaría como descalificativo, "sabihondo" no tengo dudas de que lo eres!! Pero esto último lo disimulas bastante haciendo gala de lo que aquí, en tierras pampeanas, podría llamar pensamiento trotsko-obnubilado.

Obnubiliación que entre los especímenes locales suele llegar a fantásticas y delirantes lecturas de la realidad propias de los miembros de las sectas evangelistas que aplauden como alienados en plazas públicas de estaciones de trenes derrumbadas dirigiéndose a los últimos de los últimos para predicarles la inminente llegada del redentor, en el caso de los trotskos, de la revolución.

Debo aclarar que no digo esto descalificativamente, pese a compartir la matriz marxista con ellos -muchos de ellos amigos o ex compañeros-, básicamente admiro su condición de militantes y lamento cierto grado de alienación mental a veces a niveles patológicos. Como me considero arltiano, no puedo dejar de estar un poco de su lado.

En fin, no es el fin responder a ello, sólo te enviaba el artículo de La Nación, porque siendo una empresa próxima a la expropiación (la semana que viene cuando tomemos el gobierno en nombre de las masas argentinas sedientas de revolución), diario que ha sido rabiosamente opositor al gobierno del demonio Kirchener, no se lo puede tildar de oficialista, pese a dar pruebas en ese artículo de una actitud bastante lejana a la complicidad o complacencia del gobierno.

En fin, sigámoslo en todo caso este tema o sus derivaciones definitivamente con Legui.

Y ahora paso al tema importante: realmente apasionante y profunda la historia de tu abuelo. Con mucho gusto trataré de acercarme al barrio que por supuesto existe de Belgrano. Justamente se trata de uno de los barrios donde más de un director de escuela pija hubiera declarado fiesta nacional por la muerte de K. y donde debe haber un gran predominio de lectores de La Nación y Clarín.

Desconozco si el colegio aún existe, apostaría que sí, probablemente el amigo C. lo sepa, dada su involucramiento hasta avanzada edad a la Iglesia Católica y a haber vivido en las inmediaciones. Le puedo preguntar.

También pensaba mientras leía tu historia y tu pedido, que sería genial poder ir juntos hasta allí, contigo, en exploración kataploviana presintiendo más de una historia por descubrir allí, más de un AK de sotana, y algún que otro tesoro o perlita que habrá de complacer a tu longevo nono.

Quedáte tranquilo que tendrás testimonios gráficos o noticias sobre el lugar, pero no descartes esa posibilidad, dile a tu abuelo que "rompa el canuto" (como decimos aquí los jóvenes) y te financie el billete para la excursión, que aquí encontrarás a tu hermano franciscano que te da hospedaje, comida y malbec suficiente para encarar la exploración...

Te mando un gran abrazo (con brazos de resortes que te rodean varias vueltas, y te sueltan rápidamente dejándote girar como un trompo).

AK

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Estimado Kata,

Haciendo mis pimeras exploraciones satelitales y siguiendo tus coordenadas; según el Google Earth que es muy preciso para las zonas civilizadas como Buenos Aires, en la calle La Pampa 22 o La Pampa 26 se encuentra la punta de la pista del aeroparque de la ciudad de Buenos Aires, a pocos metros del río más ancho del mundo, el Plata.

Probé buscar la calle 2226 (o sea 2200 metros un poco más adentro de la ciudad (unas 22 cuadras) y eureka, aparece indicado un colegio Manuel Belgrano, efectivamente en el barrio homónimo. Te sugiero hagas la prueba confirmar con el nono la dirección real pero sin dudas se trata del mismo. Estoy segurísimo y lo descubrí porque allí aparecen tres fotos de algún alumno que, además de mostrar un (horrendo) edificio de mármoles que parece más bien un mausoleo, hay una gigantografía con la imagen de alguien que juro tiene algo que ver con tu abuelo si no era su hermano o primo, al menos iban a la misma óptica a hacerse los anteojos, mira tú con tus propios ojos...

Busca en el google Earth: La Pampa 2226 Belgrano Buenos Aires.

Bueno eso es todo por el momento, mi estimado.

Es otro servicio de AK Satellital Comunications & Intelligency Inc.

Hasta la próxima,

A.

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Muchísimas gracias, Lucarno,

Las instantáneas satelitales fueron inmediatamente enviadas a mi hermana mayor, que se las llevó por la tarde a casa del abuelo en Va. El cable de vuelta confirma lo certero de tu investigación y es, hasta cierto punto, enternecedor. Te lo reproduzco:

"Estuvimos viendo las fotos con él. ¡Casi le da algo! Recordaba el patio... las ventanas del aula donde él dio clase dos años a 40 alumnos..."
Sin embargo, nada dice del posible parentesco entre mi nono y el cura de la gigantografía. Es posible que ahí te equivocaras. Los Favila somos miopes y un poco megalómanos, pero no hasta el punto de ese caballero pegado a la pared del colegio Belgrano, que lo que a mí me parece que es es el híbrido perfecto de Mao Tse-Tung y Ruhollah Khomeini.

Mil gracias otra vez, compañero.

Y sí, quizá tengas razón: mejor será hacer la excursión cuando yo vaya para allá, y que compartamos juntos el hallazgo de la versión marista de Arturo Kataplof, que seguro que está allí apostado en la calle la Pampa 2226, al acecho de niños curiosos por traspasar la puerta de mármol y aprender con él el truquito de la verga mágica.

Voy a ver si sale alguna oferta milagrosa de avión para estas Navidades, porque esperar, lo que es esperar a que el canuto se rompa por arte de birlibirloque, no creo que sea muy buena idea.

Salud, querido amigo,

y mucha anarquía.


Favilone, Arturo