Siempre me
pregunté por qué los comunistas, igual que los falangistas, se llaman entre
ellos "camaradas" ('compañeros de cámara, de habitación'), siendo
como son por lo general tan patriarcales y tan machitos los unos y los otros. El
inefable calipsoniano costarricense Walter Ferguson, en una de sus estrofas
cargadas de sabiduría, nos da una pista que puede ser crucial para resolver ese
enigma:
"El mono y
la mona sentados en la grada,
la mona le dijo al mono: yo soy tu camarada."
la mona le dijo al mono: yo soy tu camarada."
Walter "Gavitt" Ferguson
Rumba en Cahuita (2'59")